Cientos de personas se hicieron presentes en la sede de la Iglesia Universal de Mérida para participar de esta reunión especial, ministrada por el pastor Miguel encargado a nivel nacional del trabajo de los Obreros de la Iglesia.
Quien enfatizó a los presentes la importancia de tener un corazón limpio y volver a los brazos del Señor Jesús. Muchos que habían dejado la presencia de Dios, regresaron y tuvieron la oportunidad en esta reunión de entregar su vida en el altar, siendo fortalecidos y renovados espiritualmente con la búsqueda del Espíritu Santo.