Te lavas el pelo y tus rizos lucen perfectos. Sin embargo, con el paso de las horas, la onda va cayendo y tu cabello pierde definición y movimiento. Para evitarlo y poder lucir unos rizos perfectos las 24 horas del día te mostramos unos sencillos trucos que puedes seguir. ¡No pierdas detalle!
Se trata de dos prácticos consejos que puedes poner en práctica mientras te arreglas o mientras estás durmiendo. ¡Tú decides!
Rizos bonitos todo el día
Antes de lavarte el pelo, lo primero es desenredar bien toda la melena para facilitar su posterior peinado. Después de lavártelo, espera a que esté ligeramente mojado para aplicarle una espuma moldeadora. Aplícatela por toda la cabeza, de la raíz a las puntas. De esta manera, la humedad de tu pelo ayudará a que mantenga la forma deseada mientras tarda en secarse.
Es muy importante la cantidad de espuma aplicada, porque un exceso de la misma puede provocar un pelo demasiado apelmazado y de apariencia “grasa”. Debes tener en cuenta que la proporción recomendada para las melenas largas que llegan hasta el pecho cuando están mojadas es de una nuez grande, similar al tamaño de una pelota de tenis. A partir de esta medida, ya sabes si tienes que quitar o poner más.
Para que tus rizos queden totalmente definidos y marcados, divide el cabello en dos mitades y trénzalas entre sí, desde la mitad hacia las puntas. Si quieres que tu melena luzca más rizada, entonces empieza a trenzar desde la raíz.
Al cabo de unas horas, y cuando el pelo esté totalmente seco, desbarata la trenza suavemente. Por último, sólo queda que le des “forma” a tu pelo con la ayuda de un spray fijador. ¡Notarás el resultado!
Rizos más esponjosos
¿Quieres conseguir unos rizos pequeños, abiertos y muy marcados? Lo único que tienes que hacer es humedecer tu pelo y dividir todo el cabello en unos 15 o 20 mechones. A continuación, y uno a uno, ve rulándolos y retorciéndolos con fuerza. Con la ayuda de un secador con difusor aplica un poco de calor al tiempo que los vas apretando con los dedos. ¡Listo! Si pasan las horas, y notas que el rizo ha perdido un poco de definición, humedece ligeramente tu melena, ¡y resuelto!
Tus básicos
- Utiliza gamas de tratamiento específicas para el cabello rizado: champús, mascarillas y espumas.
- La ventaja de tener el pelo rizado es que no necesitas secártelo para conseguir la forma deseada. Así que, aprovéchate e intenta prescindir del calor del secador.
- Para el pelo rizado, el mejor peine que existe son tus dedos. Evitarás enredos y tirones.
- Si utilizas el secador porque tu melena está muy mojada, ponle un difusor para que el calor no deshaga demasiado el rizo.
- Cuando tus rizos hayan perdido definición, tu aliado imprescindible es un acondicionador sin aclarado. ¡Funciona!
Fuente: http://www.nosotras.com