Ser consagrado significa ser separado para Dios y esto fue lo que sucedió con el grupo Caleb de Caracas. Adultos mayores que recibieron esta bendición sobres sus vidas. Una reunión espiritual donde todos unieron su fe y entregaron sus vidas en el altar. En esta oportunidad el pastor Alex encargado del trabajo del grupo Caleb y el pastor Marcos le pidieron a Dios que fuese derramado en el corazón de los presentes, fortaleciéndolos y llenándolos con su presencia.
Cada uno de ellos salió lleno de paz y felices por haber compartido un momento tan sublime como lo fue.