La sra. Evangelina Rivas era una señora que debía ingerir medicamentos de por vida, debido a los problemas que tenía con la tensión, ella nos dice que ya no sabía qué hacer y además de esto, su situación empeoró debido a que sufrió una fuerte infección y debido a ésto los médicos la querían intervenir quirúrgicamente.
“Recuerdo que fue muy fuerte para mí pasar por todo esto, pensé que no viviría o que quedaría con algún tipo de secuelas. En medio de tanta preocupación recibí una invitación para asistir a la Iglesia Universal, donde comencé a participar y a recibir la unción con el aceite Santo, poco a poco a través de la fe logré ser libre de todo mal, los malestares desaparecieron, vencí la infección que tenía y no me tuvieron que operar. Hoy soy una mujer sana, gracias a Dios.