¿Qué haría usted si tuviera la oportunidad de regresar en el tiempo? ¿Cambiaría algo en su vida o en la vida de otra persona? ¿Haría algo diferente para el mundo o solo observaría las sucesiones de momentos que pasarían justo delante de sus ojos?
El tiempo desarrolla los eventos en todas las fases de nuestra vida. Seguramente usted ya se vio pensando en algo o alguien del pasado y se hizo la pregunta: “¿Y si yo hubiese hecho esto o aquello? Todo podría haber sido diferente.”
Aprovechar una oportunidad que dispensó por creer no necesitar de aquello en aquél momento, dedicarse a una relación sin preocuparse solamente con su propio bienestar, pasar más tiempo con un familiar, estudiar con más ahínco para aquél examen. En fin…
Pensar en estas posibilidades no significa insatisfacción con el rumbo de su vida. Todos tienen recuerdos y nostalgia. Es natural pensar en lo que pasó. Pero esté atento para aprovechar lo mejor que aquella experiencia le ha dejado. No deje que los recuerdos le impidan de seguir la caminata para una nueva historia.
Si usted pudiera cambiar su pasado, reajustando todos los detalles como una película siendo editada por el director, imagínese cuál sería la sensación de vivir repetidas veces la misma cosa, intentando cambiar algo. ¿Cuántas veces necesitaría cambiar el pasado para satisfacer su propia voluntad? Buscando el momento correcto o la persona ideal, poco a poco el individuo correría el riesgo de tornarse una persona obsesionada.
No deje que el tiempo anule sus expectativas y planes. Lo que pasó, un día perteneció a su vida, pero de ahora en adelante, será solo un complemento de errores y aciertos para las nuevas experiencias.