Cada vez más se está demostrando que el estilo de vida y la alimentación que llevamos influyen en la calidad de vida que tendremos en nuestro proceso de envejecimiento. Algunas de las consecuencias que queremos prevenir son la pérdida de la habilidad para concentrarse, el desbalance emocional y la reducción de la agilidad intelectual, así como el hecho de sentirse débil y pasivo, desinteresado y muchas veces deprimido. Después de leer esto seguro que querrás saber qué es lo que te puede llevar a conseguir una mente sana que se verá reflejada en un cuerpo lleno de vida.
Existen algunos pasos que te ayudarán a realizar ese cambio de estilo de vida que necesitas para prevenir o minimizar los efectos del proceso de envejecimiento. Por ejemplo, a través de un estilo de vida sano que incluya el ejercicio regular, no fumar y mantener los niveles de colesterol controlados a través de una dieta saludable. Todo ello disminuirá los riesgos de enfermedades cerebro-vasculares. El ejercicio regular no sólo te ayudará a mantener un buen estado físico en la vejez sino que además suple el cerebro con oxígeno y aumenta la capacidad cerebral entre un 20% y un 30%. El abstenerte del alcohol y del tabaco, así como de otras drogas y sustancias psicoactivas te ayudará a mantener el proceso neuronal que necesita tu cerebro para procesar la información y conservar una buena memoria.
Debido a que las personas al envejecer tienden a comer menos, una dieta rica en frutas, vegetales y legumbres, pescados, carnes blancas de pavo y pollo y mucha agua te ayudará a mantener un buen balance nutricional. Trata de disminuir el consumo de carnes rojas, cafeína y gaseosas, así como los alimentos ricos en sal y azúcares. Los productos bajos en grasas y la comida rica en nutrientes son altamente recomendados. Este tipo de dieta te ayudará a prevenir las deficiencias de vitaminas tan necesarias para el buen funcionamiento de tu cerebro. Procura comer muchas moras, fresas y ejercitar tu memoria a través de ejercicios simples como memorizar teléfonos, fechas importantes y listados. Hacer crucigramas y rompecabezas, así como leer también es una buena manera de ejercitar tu mente y poner a trabajar las neuronas.
Dormir y descansar es muy importante para conservar el balance físico, mental y emocional. Dedica tiempo para relajarte y disfrutar tu vida tal y como se vaya presentando. Crea relaciones duraderas que te permitan no sólo socializar sino apoyarte en momentos difíciles. Recuerda que para tener una mente sana y creativa es importante cultivar hábitos que permitan tu crecimiento personal.
Fuente: http://www.discoverymujer.com